Muchas mañanas nos levantamos con los ojos hinchados y congestionados debido a una retención de agua. Las ojeras y bolsas debajo de los ojos son síntomas que reflejan problemas circulatorios y poco descanso. No hay nada peor en un rostro que una mirada triste, cansada. Los párpados hinchados y caídos a causa del cansancio envejecen, reflejan debilidad, poca salud, tristeza y, por añadidura, afean el rostro.
Algunas veces revelan una noche sin dormir o un gran cansancio; otras, desenmascaran los hábitos alimenticios y la herencia genética. Por eso, para no tener una mirada opaca y una expresión triste, es ideal conocer las causas del problema y aplicar productos o remedios caseros que las atenúen.
Con unos simples ejercicios oculares de procedencia china y basada en el yoga se puede descansar la mirada, descongestionar los párpados y conseguir que nuestro rostro recupere frescura y jovialidad.
Toma nota de los siguientes ejercicios. Son tan simples que puedes hacerlos en cualquier parte: en casa sentada en el sofá, en el metro leyendo el periódico o en el autobús...
Ejemplos de ejercicios de yoga para el cuidado de tus ojos
- Relajar la vista: el trabajo en el ordenador cansa la vista, por eso es necesario relajar los ojos de vez en cuando mientras trabajamos, podríamos considerar como reglas de oro: parpadear a menudo y cada diez minutos más o menos fijar la vista en un objeto lo más distante posible por espacio de cinco o diez segundos.
- Palmeo: a media jornada resulta aconsejable ejecutar un simple ejercicio de palmeo que favorece la relación de los ojos y de todo el cuerpo. Se realiza sentado y consiste en tapar los ojos con la palma de las manos ligeramente ahuecada, sin llegar a presionar los ojos. Los dedos de una mano se colocan encima de los de otra, sobre la frente. Luego se cierran los ojos, se respira profundamente y uno se imagina que son los ojos los que están respirando. La autosugestión continúa imaginándose un paisaje agradable en el que realizamos una actividad que nos hace sentir a gusto, Este ejercicio puede durar unos diez minutos y puede repetirse al final de la jornada laboral, junto a un masaje circular de los ojos.
- Cambios de mirada: con los ojos abiertos dirige la mirada hacia arriba y abajo, a derecha e izquierda y haz un círculo. Lo repites después con los ojos cerrados. Hazlo 3 veces.
- Parpadeos: con los ojos cerrados y relajados, despega suavemente el párpado superior. Vuelve a cerrar el párpado hasta que lo sientas pegado al ojo y vuelve a despegarlo. Repítelo de 5 a 10 veces.
- Pellizcos en las cejas: con los dedos índice y pulgar, pellizca la parte interna de la cejas (la parte que está tocando el entrecejo) y después sigue todo el recorrido de la cejas a pequeños pellizcos. Repítelo de 3 a 5 veces.
Al finalizar repite el "palmeo" descrito en primer lugar.