He recorrido Europa en varias ocasiones, y sin embargo, cada vez que lo hago encuentro cientos de lugares nuevos que ver. Algunos de ellos porque en mis anteriores rutas de viaje no estaban programados, otros porque simplemente no me percaté de que podía conocerlos de una manera distinta. Esta es una de mis vistas que quiero compartir con vosotros, y es un recorrido por Budapest en Tranvía.
Como dato necesario para comprender por qué es una buena idea recorrer Budapest en Tranvía, debo agregar que la ciudad cuenta con cerca de 40 líneas de este servicio que la recorren completa desde muy temprano por la mañana (comienzan a funcionar a las 04:30 hs.) hasta las 23 hs. Entre los coches podremos encontrar los viejos tranvías y de los nuevos, todos en perfectas condiciones. Son muy rápidos y económicos (aproximadamente 1 Euro cuesta el pasaje), lo que más allá de los bellos paisajes que permite admirar interesa a los turistas que disponen de pocos recursos económicos.
Algunas líneas son famosas por sus vistosos recorridos, tal es el caso de la número 2 que Recorre la orilla este del Danubio con paradas en el Puente de las Cadenas, el Parlamento, el Mercado Central y en todos los puntos de interés de la orilla de Pest. Al final de su recorrido hacia el norte, la línea se convierte en el punto ideal para explorar la Isla Margarita.
La línea 19 tiene un trazado de recorrido similar a la número 2 pero en la otra orilla del Danubio. Sobre esta margen se puede observar mejor la Colina Gellert, la Iglesia de Santa Ana o el Bastión de los Pescadores.
Otras líneas interesantes son los números 4 y 6 cuyo recorrido rodea completamente la ciudad, permitiendo a los visitantes disfrutar de todos los encantos de Pest (estas siempre están abarrotadas de pasajeros pues son muy útiles al momento de ir de un extremo a otro de la ciudad.
Como os indicaba en un comienzo, lamenté mucho no haber conocido esta manera de ver Budapest desde un comienzo.
